El verano está aquí y con él llega la necesidad de postres más refrescantes y livianos. Y si hay algo que no puede faltar en la temporada de calor, es el limón. Su aroma y sabor ácido son la base perfecta para crear postres deliciosos y frescos. Para ello, hoy te traigo la receta de un clásico francés: el soufflé de limón.
En una olla mediana, mezcla el azúcar granulada, la maicena y la sal. Añade el agua y el jugo de limón y revuelve bien. Cocina a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente hasta que la mezcla espese y alcance una consistencia parecida a la de una pudín. Retira del fuego y agrega las yemas, una por una, revolviendo bien después de cada adición.
En un tazón grande, bate las claras de huevo hasta que estén firmes pero no secas. Incorpora suavemente la mezcla base en las claras de huevo, mezclando con cuidado para que las claras no pierdan su firmeza.
Vierte la mezcla en un molde para soufflé previamente engrasado cubriéndolo hasta tres cuartos de su capacidad. Coloca el molde en una bandeja para hornear y agrega suficiente agua caliente en la bandeja para que llegue a la mitad del molde para soufflé. Hornea a 180 grados Celsius durante unos 30-40 minutos o hasta que el soufflé esté dorado. Sirve inmediatamente, espolvoreando con azúcar glas, si lo deseas.
El soufflé de limón es el postre perfecto para disfrutar en verano. Es refrescante, ligero y tiene un sabor deliciosamente ácido. Con esta receta, podrás preparar un verdadero clásico francés en tu propia cocina. Asegúrate de seguir los consejos útiles y podrás sorprender a tus invitados con un postre magnífico.