Introducción

Cuando pensamos en postres, a menudo nos vienen a la mente los típicos pasteles, brownies y galletas. Sin embargo, no podemos dejar de lado a los deliciosos helados, que son perfectos para refrescarnos en los días de calor y como postre después de una comida. En este artículo, los chefs especializados en postres de 'Cocina y menaje' te traen algunas recetas de helados basados en bebidas populares como el café y el té.

Receta de helado de café

Si te encanta el café, seguro que te encantará probar este helado de café casero. Para hacerlo, necesitarás:

• 1 y 1/2 tazas de leche
• 1 y 1/2 tazas de crema para montar
• 3/4 taza de azúcar blanco
• 3 yemas de huevo
• 1/2 taza de café molido fino
• 1 cucharada de extracto de vainilla

Para empezar, combina la leche, la crema y el café molido en una cacerola y calienta a fuego medio hasta que empiece a hervir. Una vez que empiece a hervir, retira la mezcla del fuego y déjala reposar durante 30 minutos para que los sabores se integren. En un tazón aparte, bate las yemas de huevo con el azúcar hasta que la mezcla esté pálida y espesa. Añade la mezcla de leche y café poco a poco a las yemas de huevo, removiendo constantemente para que no se cuajen. Cuando todo esté mezclado, devuelve la mezcla a la cacerola y calienta a fuego medio-bajo, sin dejar que la mezcla llegue a hervir. Remueve constantemente hasta que la mezcla espese. Cuando la mezcla esté lo suficientemente espesa, retírala del fuego y añade el extracto de vainilla. Déjala enfriar a temperatura ambiente y después ponla en el congelador durante al menos 4 horas o hasta que esté sólida.

Consejos:

Si quieres darle un toque extra a tu helado de café, puedes añadir un poco de jengibre o canela en polvo a la mezcla. También puedes rematarlo con un poco de crema batida o chocolate derretido.

Receta de helado de té chai

El té chai es uno de los tés más populares, un té con especias que nos transporta a la India con cada sorbo. Si te encanta el té chai, seguro que también te gustará este helado de té chai. Para hacerlo, necesitarás:

• 1 taza de leche
• 1 taza de crema para montar
• 1/2 taza de azúcar moreno
• 2 bolsitas de té chai o 2 cucharadas de té chai en hojas
• 4 yemas de huevo
• 1/2 cucharadita de extracto de vainilla

Para empezar, pon la leche y la crema en una cacerola y calienta a fuego medio. Añade las bolsitas de té y deja que la mezcla caliente durante unos 5 minutos o hasta que coja todo el sabor del té. Mientras tanto, bate las yemas de huevo con el azúcar y la vainilla en un tazón aparte hasta que la mezcla esté pálida y espesa. Una vez que la mezcla de leche y té esté lo suficientemente caliente, retira las bolsitas de té y añade poco a poco la mezcla a las yemas mientras sigues batiendo. Vuelve a poner la mezcla en la cacerola y calienta a fuego medio-bajo, removiendo constantemente hasta que la mezcla espese. Cuando la mezcla esté lista, retírala del fuego y deja que se enfríe a temperatura ambiente antes de ponerla en el congelador durante al menos 4 horas o hasta que esté sólida.

Consejos:

Si quieres darle un toque extra a tu helado de té chai, puedes añadir unas cucharadas de miel o sirope de arce a la mezcla antes de ponerla en el congelador. También puedes añadir un poco de canela o cardamomo en polvo para realzar todavía más el sabor del té.

Receta de helado de té verde

El té verde es uno de los tés más populares, gracias a sus múltiples beneficios para la salud. Si quieres disfrutar de sus propiedades de una forma refrescante, te animamos a que pruebes esta receta de helado de té verde. Para hacerlo, necesitarás:

• 2 tazas de leche
• 2 tazas de crema para montar
• 1 taza de azúcar blanco
• 4 yemas de huevo
• 1/2 taza de té verde en hojas

Para empezar, pon la leche y la crema en una cacerola y calienta a fuego medio. Añade el té verde y deja que la mezcla caliente durante unos 5 minutos o hasta que coja todo el sabor. Mientras tanto, bate las yemas de huevo con el azúcar en un tazón aparte hasta que la mezcla esté pálida y espesa. Cuando la mezcla de leche y té esté lista, retira las hojas de té y añade poco a poco la mezcla a las yemas, removiendo constantemente. Vuelve a poner la mezcla en la cacerola y calienta a fuego medio-bajo, removiendo constantemente hasta que la mezcla espese. Cuando la mezcla esté lista, retírala del fuego y déjala enfriar a temperatura ambiente antes de ponerla en el congelador durante al menos 4 horas o hasta que esté sólida.

Consejos:

Para darle un toque de color a tu helado de té verde, puedes añadir un poco de té matcha en polvo a la mezcla antes de ponerla en el congelador. También puedes rematarlo con algunos frutos rojos frescos, como fresas o arándanos.

Conclusión

En definitiva, los helados son una deliciosa opción para refrescarnos en los días de calor y también pueden ser un postre perfecto para cualquier ocasión. Esperamos que estas recetas de helados basados en bebidas populares como el café y el té te hayan resultado interesantes y que te animes a probarlas. ¡Buen provecho!